jueves, 3 de julio de 2008

Joven ha de ser…





Les comparto fragmentos de un bolero que no por añejo resulta viejo y encierra además una hermosa verdad:


"Joven no es solo el que tenga (…) fresca y lozana la piel, ardorosa al amor,


Joven es todo el que sea capaz de soñar y de hacer (…)


Si el jardinero la cuida con celo y amor


Siempre tendrá nueva flor el añejo jardín,


Joven ha de ser,


quien lo quiera ser


por su propia voluntad


Si en el corazón, brilla la ilusión


Nunca llegará el final".


¿Me ayudan a completar la letra, a recordar quién es el autor y el intérprete que la popularizó?

martes, 24 de junio de 2008

¿Contar hasta tres… o mucho amor?

La convivencia con las personas de la tercera edad no resulta fácil para muchos, sobre todo cuando éstas han perdido facultades físicas o mentales. La convivencia de varias generaciones genera una verdadera revolución en casa y es cada vez más común encontrar a abuelos, hijos y nietos compartiendo el hogar.

La dinámica de la vida moderna y todo lo que ello genera nos separa a veces de la fundamental misión de nuestras vidas: el bienestar de nuestra familia. Las personas mayores van quedando incapacitadas para mantener el hogar, pero no por ello deben quedar relegadas a un plano inferior. Ellas han cumplido una labor importante en la vida y han llevado las riendas por muchos años. Gratitud y amor es lo que merecen.

Es común escuchar frases como: "Los mantengo y no les falta nada, ¿De qué se quejan?"… "Cada día está más achacoso… como si no fuera bastante con mis problemas". "¿Te volviste a salir en la cama!?" Si reflexionamos un poco y nos ponemos en su lugar llegaremos a una simple y llana conclusión: comprensión, respeto y sobre todo mucho amor es lo que necesitan. Recuerde que todos aspiramos a llegar a viejos y el ejemplo que demos a nuestros hijos de cómo cuidar a los abuelos será revertido en nosotros mismos.

Educa a tu familia en el amor y el respeto a las personas mayores, atiende sus diferencias y comprende sus limitaciones. No le exijas al viejo que vaya a tu ritmo, no lo agobies con problemas que no puede resolver. Tampoco lo relegues y excluyas, deja que participe de algunas tareas del hogar y que se sienta útil. En fin, en vez de contar hasta tres, cada vez que te saquen de paso, respira hondo y recuerda que en gran medida eres quien eres gracias a ellos y que les debes mucho, pero mucho amor.

Disfrutar plenamente de la tercera edad.

Cada día son más los que pasan a las filas de la tercera edad. La esperanza de vida en aumento nos va llevando a una sociedad donde predominarán los viejos. Llegar con una alta calidad de vida es un reto para todos y no podemos esperar a llegar para empezar a preocuparnos por ello.

¿Cómo adoptar un estilo de vida positivo para disfrutar plenamente de nuestra tercera edad?

  • Dé un sentido a su vida.

Si se propone objetivos y metas, siempre considerando sus posibilidades y capacidades verá que el tiempo no le alcanza. Propóngase objetivos importantes, que lo motiven a seguir adelante y ver la vida en positivo. Trate de ayudar a los demás, de aportar de su experiencia con amor y buena voluntad.

  • Mantenga una vida activa física y mentalmente.

Estudie, para eso no hay límites de edad, lea y disfrute de entretenimientos que activen su mente. Realice crucigramas, puzzles, participe en actividades que pongan a prueba su memoria y conocimientos y no deje que el tedio lo embargue. Cambie de actividad de forma frecuente y trate de involucrar en ellas a la familia y amigos. Practique ejercicios físicos sin excederse. Es muy aconsejable caminar, sobre todo después de las comidas. Aproveche para visitar a los amigos y hacer otros nuevos.

  • No se aferre a las costumbres.

Trate de variar de cuando en cuando sus costumbres, no haga las cosas siempre de la misma forma. Es muy aconsejable cambiar los muebles de lugar, guardar las cosas en un nuevo sitio, caminar por un nuevo itinerario, aún cuando tengamos que ir al mismo lugar. Pruebe nuevos alimentos o prepare los que le gustan de forma diferente. Recicle el ropero.

  • Ponga su mente a producir.

Si tiene una habilidad explótela, si cree que no la tiene cultívela. Aprenda a hacer, ya sea un arreglo floral, un juguete artesanal o un poema. Nunca es tarde para comenzar y esta práctica creativa, a la vez que mantiene su mente activa, le puede dar muchas satisfacciones.

  • Cultive el amor y la sabiduría en su familia.

Transmita sus experiencias al resto de la familia, no pierda la oportunidad de enseñar a los más pequeños, de transmitir lo que has aprendido y experimentado a lo largo de la vida. Aprovecha ese poquito de tiempo para compartir con ellos y ayudar a formar a las nuevas generaciones. Eso sí, no pretenda que ellos hagan o entiendan las cosas de la misma manera que usted, los tiempos cambian.

Una actitud positiva ante la vida nos permitirá enfrentar los mayores obstáculos, con alegría y entusiasmo, con esperanza infinita. Por que como dijo un poeta: "Los años pasan, sí, la vida no".